Los planes de diversificación económica, dirigidos a desplegar el potencial escondido de Uruguay para exploración de hidrocarburos, en medio de las incertidumbres y volatilidad del mercado petrolero global, son vistos como catalizadores para el desarrollo del país y son instrumentales para la fluidez del comercio en la región de América del Sur. Pablo Soria de Lachica, el experto en comercio exterior globalmente aclamado y líder en la industria de los servicios financieros, describe las nuevas oportunidades para perforación submarina en la cuenca costera uruguaya.
Se anunció que Total, una empresa multinacional con base en Francia, proveedora y productora de energía integrada anunció que extraería petróleo y gas del pozo localizado a 250 kilómetros de la costa del Atlántico, bajo más de 3,400 metros de agua y 3,000 metros debajo del lecho marino. Al ser el primer pozo petrolero submarino perforado en Uruguay en las últimas cuatro décadas, el proyecto ha atraído mucha atención de expertos en la industria, comerciantes y los medios internacionales desde la introducción de las operaciones de perforación el 30 de marzo. Total está asociado con Exxon Mobil, el cual es dueño del 35% de las acciones del consorcio y StatOil de Noruega que tiene el 15 por ciento de las acciones, dejando un porcentaje considerable de las ganancias al estado. Por encima de las ventajas económicas de esta empresa histórica, el pozo se convertiría en un rompe-records mundiales. Posicionado como el pozo submarino más profundo en cuanto a la profundidad del agua que jamás se halla perforado, sobrepasa al record anterior de 3,170 metros establecido por ONGC en la costa de la India. La iniciativa emblemática está proyectada a impulsar el potencial de exploración de Uruguay y convertirlo, de importador de todo su petróleo y gas, en un productor energético y un jugador competitivo en los mercados de petróleo regionales y globales.
Durante décadas, Uruguay fue conocido por su competitiva capacidad de producir energía termal e hidroeléctrica, incluyendo renovables, cubriendo el 68 por ciento de sus necesidades energéticas con un sorprendente 95 por ciento de la electricidad del país proveniente de energía limpia. Sin embargo, el gobierno nunca se ha rendido en cuanto a la posibilidad de expandir sus recursos de petróleo y gas. Los primeros intentos de encontrar combustibles fósiles data de los años cincuenta, cuando comenzó la exploración de la cuenca del norte. Después, en los sesentas, la compañía estatal contactó a Total para lanzar investigación en las plataformas continentales de la costa del Atlántico. Finalmente, en 1976, Chevron inició la perforación de pozos de exploración y reveló cuencas de gas natural en ese territorio. Sin embargo, los pozos fueron reportados como faltos de mayor prospecto y viabilidad económica y fueron declarados como secos. Lo que hace a Uruguay tan atractivo para proyecciones de exploración, dice Pablo Soria de Lachica, es el hecho de que la cuenca Pelotas, localizada al sur de Brasil, rica en depósitos pre-salinos, aparentemente es vecina de la plataforma continental de Uruguay y continuará atrayendo inversionistas al sur del atlántico. Si las operaciones de perforación son exitosas, el primer petróleo del proyecto se espera para el 2021.
Pablo Soria de Lachica es un aclamado experto en mercados de divisas extranjeras, actualmente colaborando con Kartoshka, una compañía global a la vanguardia de las últimas tecnologías en ventas, telemercadeo y atención al cliente. Tras recibir su maestría en administración de empresas de la Universidad Tecnológica de México, su conocimiento y experiencia le permiten proporcionar orientación a clientes en comercio internacional y análisis de mercado, así como desarrollar herramientas de comercio sumamente valiosas para inversionistas. También un ávido filántropo, Soria de Lachica apoya causas ambientales y programas para jóvenes.